"Habanece" en Zaragoza

El jueves 25 de marzo se clausura la décima edición del ciclo de cine "Una mirada a otras culturas", que durante seis jueves ha ocupado el hall de la zaragozana Casa de las Culturas (C/ Palafox, 29)con un cine de ficción y documental que pretende acercarnos a otras realidades sociales y a productos audiovisuales menos presentes en el circuito comercial. La última película del ciclo, que se proyectará a partir de las 19.30 y con entrada libre, supuso la primera incursión en el largometraje del realizador Jorge Nebra (Zaragoza, 1973): "Habanece". Desde este blog, adelantamos la entrevista que el cineasta concedió a uno de nuestros miembros y que servirá de presentación al acto.

Pregunta. La Escuela de Cine de San Antonio de los Baños es todo un referente y ha licenciado a muchos españoles. ¿Cómo fue tu experiencia allí?

Respuesta. Mi experiencia fue muy positiva. Pero ten en cuenta que yo simplemente me especialicé en dirección de fotografía y no hice el curso regular. Las vivencias más intensas vinieron tras esta experiencia y decidir quedarme a vivir allí y comenzar a desarrollar “Habanece”, pero la enseñanza fue muy positiva además del increíble entorno donde está ubicada la escuela; que es una de las mejores escuelas del mundo eso es indudable. Ten en cuenta que tanto la enseñanza como la industria de cine en general en la isla está muy retrasada y ello conlleva el tener que trabajar sin apenas recursos tecnológicos y basándonos en los recursos más tradicionales, y eso hace que el país sea una cantera de grandísimos técnicos y profesionales en este oficio y en muchos otros como en el caso de la medicina.

P. Las dificultades para sortear la burocracia cubana y rodar la película fueron notables. ¿Qué fue lo más frustrante y qué te dio más ánimos?

R. Notables no: fueron horrorosamente frustrantes. Lamentablemente, como todo, el cine está muy politizado y existe una gran censura. Todo el cine de la isla está monopolizado en una entidad pública, el ICAIC, y lo que viene tras ello, te lo puedes imaginar. Si te fijas el cine cubano no muestra, se basa en la metáfora. No en enseñar al espectador.

En el caso de “Habanece” se intentó hacer por la vía legal, y tras ser censurado el guión, a pesar de volver prácticamente a escribirlo con un reconocidísimo guionista y director del país, Ernesto Daranas, decidí hacerla por las puertas de atrás, como se suele decir.

Posteriormente tras el rodaje (en sólo 16 días) el negativo se sacó de la isla para su posterior procesado en España. Y al fin pudimos acabar la película. En total fueron, desde que comencé a escribirla, más de 5 años de trabajo . Luego vinieron los problemas, tras ser seleccionada en diversos festivales internacionales, principalmente en EEUU. Ésta se politizó y se prohibió en el país caribeño. Aún no entiendo los motivos.

P. A presupuestos exiguos, más imaginación. ¿Hasta qué punto las nuevas técnicas ayudan a los proyectos pequeños?

R. Sin las nuevas técnicas gran cantidad de los proyectos serían directamente imposibles de ejecutar. La tecnología ha facilitado enormemente la accesibilidad del Séptimo arte a la población en general, con lo que ello conlleva. Hoy en día te puedes hacer una película en casa con apenas medios. Hace no tanto tiempo esto era imposible. Eso sí, lo que nunca cambiará independientemente del presupuesto es la importancia de un buen guión. Éste es la base para poder hacer cualquier buen producto.

P. ¿Qué refleja esta película de Cuba? ¿Qué nos cuenta que ya no supiéramos o nos descubre nuevas perspectivas?

R. Esta película a traído muchos comentarios en ese aspecto pero está rodada en un entorno (principalmente el Barrio de Colón) que se muestra como se hace en la película, ante todo con normalidad. Esta manera de vivir, la de los personajes, existe en la vida diaria. El buscarse la vida en la isla es algo habitual. Seamos francos, es lo que pasa el cualquier país donde hay cierta necesidad y en Cuba la hay.

P. Tu carrera en el audiovisual aragonés es rica en matices. Para el lego: ¿de verdad esto da para vivir y, además, saciar las inquietudes artísticas? ¿Tenemos presente y futuro en ese área?

R. Yo, afortunadamente, tengo suerte y trabajo. Vivo de ello y de dirigir de freelance. No es fácil, soy consciente y me siento muy afortunado aunque hay temporadas también malas. Pero este trabajo no es tan bonito como parece: implica un gran sacrificio y constancia además de un aprendizaje continuo. Si no ruedas estás fuera del mercado. Y te puedo asegurar que a veces rodar no es ni tan bonito ni tan cómodo ni tan bohemio como pueda parecer. Me vienen a la cabeza más de un rodaje infernal y en condiciones muy duras… pero en fin… es parte de la esencia de esta hermosa profesión. Es lo que nos gusta…